Escritos

Una táctica para defender y compartir tu fe

Autor: Mauricio Valadez

¿Por qué es importante tener estrategias para compartir el evangelio?, ¿acaso no el que convence es el Espíritu Santo? Eso es correcto, pero una cosa no anula la otra y es importante no conceder esta falsa dicotomía de “¿estrategias humanas o Espíritu Santo?” ya que no son incompatibles y, de hecho, el Espíritu Santo nos ha enseñado que él se conmueve de nuestro esfuerzo, parafraseando a San Agustín: “haz las cosas como si todo dependiera de ti, aunque todo depende de Dios». Con el evangelismo, sucede lo mismo, la tarea es 100% del hombre y 100% de Dios. Con una estrategia, no despreciamos al Espíritu Santo, ni mucho menos tratamos de anularlo, pues con esa lógica defectuosa, entonces no deberíamos hacer un esfuerzo de traducir la Biblia, ya que después de todo, el que un árabe pueda llegar a leer Jn 3:16 es su lengua nativa, no sería más que “una estrategia humana” para evangelizarlo; lo cual sería absurdo de decir.

Por otra parte, algunos cristianos afirman que no deberíamos debatir con los T (o con cualquier otra religión o secta), pero esta visión no es bíblica ni ha formado parte de la práctica cristiana ortodoxa. Jesús, nuestro máximo ejemplo, respondió hábilmente una increpación sobre Su autoridad (Mt 21:27). Jesús también calló a los saduceos en un debate sobre la resurrección (Mt 22:29). Jesús debatió el delicado tema de los impuestos (Mc 12:17). Jesús debatió con Satanás (Lc 4:4). Jesús debatió la cuestión de las curaciones en el día de reposo (Lc 5:22). Y Jesús refutó a sus oponentes sobre la cuestión de su propia identidad (Jn 8:14).1 Hay muchos otros ejemplos. La Biblia sí nos advierte acerca de los diálogos que se pueden tornar en terquedad (Pr 26:4; Tit 3:2-3; 2 Tim 2:23-26); y debemos tener en cuenta que cuando sostenemos un debate piadoso con alguien, nuestro propósito será siempre el de alcanzar a esa persona para Cristo.

 

Quizá tenemos toda la disposición para debatir y defender nuestra cosmovisión cristiana, pero este ánimo no nos servirá de mucho si no tenemos una estrategia al hacerlo, ¿cuántas veces hemos debatido con alguien sin lograr que cambie de opinión? Por ello, este apartado tiene como intención darle esas herramientas que necesitas a la hora de debatir y defender sus convicciones cristianas, no solamente con TJ, sino en general con cualquier persona, sea mormón, budista, hindú, ateo, agnóstico, etc.

La dialéctica de Sócrates tenía como fin, dar luz a reflexiones serias y argumentadas por medio de la formulación de preguntas.2 Y esa es nuestra táctica, y recomiendo al lector, grabarlo en su mente: “siempre haz preguntas”. A continuación, se presenta un ejemplo ficticio, de cómo Sócrates llevaría a cabo un diálogo mayéutico:

– Adelphos: Acabo de oír algo sobre tu amigo Eudor
– Sócrates: Antes de continuar, ¿podría hacerte unas preguntas?
– Adelphos: Claro
– Sócrates: ¿Has comprobado si lo que me vas a decir es verdad?
– Adelphos: No, sólo lo escuché.
– Sócrates: Muy bien, no sabes si es verdad. Ahora contéstame, ¿lo que quieres decirme es algo bueno?
– Adelphos: ¡Ah, no! Por lo contrario.
– Sócrates: Bien, entonces quieres contarme algo malo acerca de él y que ni siquiera estás seguro que sea verdad. Entonces, ¿es útil que yo lo sepa?
– Adelphos: No lo creo.
– Sócrates: Entonces, si lo que vas a contar no es verdadero, ni bueno, ni me trae beneficio; ¿por qué quieres decírmelo?

 

Es de notar que realizar preguntas resulta muy útil, toda vez que hacemos a nuestro interlocutor razonar sus pensamientos y no simplemente reproducir lo que ha escuchado de otros. Preguntar, es una de las herramientas más sencillas y poderosas que tenemos, ya que, si se forjan sinceramente, no solamente nos proveerán de información, sino que además mostramos interés en la persona a la que nos dirigimos, a la vez que nos permiten avanzar hacia un punto sin ser agresivos (y sin tener que defender ni demostrar nada, pues sólo estamos haciendo preguntas). Además, ya que las preguntas parecen neutrales, no crean la sensación de que estamos tratando de dar un sermón.3

Jesús, quien evidentemente conocía el funcionamiento del cerebro humano, también optó en muchas ocasiones por la táctica de preguntar, preguntar y preguntar. De hecho, en los evangelios hay más de 300 preguntas, la mayoría hechas por Jesús.

Ejemplo 1:
– Espías: Maestro, ¿nos es lícito dar tributo a César o no?
– Jesús: ¿Por qué me tientan? Préstenme una moneda
– Espías: Claro
– Jesús: ¿De quién es esta imagen y esta inscripción?
– Espías: Del Cesar
– Jesús: entonces den al César lo que es del César y a Dios, lo que es Dios.4

Ejemplo 2:
– Fariseos: Dinos ¿Quién te dio autoridad?
– Jesús: Yo también les haré una pregunta. El bautismo de Juan ¿Procedía del cielo o de la tierra?
– Fariseos: Si respondemos “del cielo” nos preguntará ¿Por qué no creyeron? y si respondemos “de la tierra” nos apedrearán -discutieron ellos, y finalmente respondieron- no sabemos
– Yo tampoco les diré con qué autoridad hago esto.5

 

Ejemplo 3:
– Maestros de la ley: ¿Quién puede perdonar pecado sino sólo Dios?
– Jesús: ¿Por qué razonan así?
– Maestros de la ley: -Silencio-
– Jesús: ¿Qué es más fácil? Decirle al paralítico: ¿Tus pecados te son perdonados” o decirle “levántate y anda”? -y dirigiéndose al paralítico, le dijo- levántate y anda -el paralítico se levantó-.
– Maestros de la ley: Nunca habíamos visto nada igual.6

Es importante aclarar que no debemos “preguntar por preguntar”, sino que nuestras interrogantes deben tener un sentido. Siempre que comenzamos un diálogo, debemos preguntarnos ¿hacia dónde queremos llegar? Por ello, es un arte hacer buenas preguntas y aunque se puede aprender, al final será la práctica la que nos convertirá en auténticos maestros. Algunos pedagogos eruditos en la materia, han comentado que hay hasta 6 tipos de estas preguntas, que son: para aclarar, para razonar, sobre asunciones, sobre causas y consecuencias; sobre origen de las ideas, sobre perspectivas y puntos de vista; y sobre las propias preguntas.7 Por razones prácticas, nosotros estudiaremos solamente tres de estos tipos, las cuales fueron desarrolladas por el apologista cristiano Greg Koukl y que bautizó a su conjunto como “la táctica Colombo” en honor a un detective de televisión, popular por descubrir al culpable de los crímenes mayormente, haciendo sólo preguntas. Koukl expresa que en todo debate que tengamos, debemos hacer estas tres preguntas (aunque hay muchas variantes de cada una), las cuales a continuación pasaremos a enunciar y a explicar de forma breve:

 

1. ¿Qué quiere decir exactamente?

Algunas variantes de esta pregunta son: ¿Qué quiere decir cuando dice x?; No sé si estoy entendiendo ¿podría explicármelo más a detalle?; Cuándo usted dice x, ¿qué significa?, etc.

Se sugiere que esta pregunta sea la que abra nuestras discusiones, dado que, cuando alguien tiene un punto de vista contrario al nuestro, es importante dejar que la otra persona se exprese sin interrupción, esto por tres cosas. La primera, para que sea él quien tenga la carga probatoria sobre lo que acaba de decir; en segundo lugar, porque en muchas ocasiones las personas no saben ni lo que están diciendo y sólo son “periquitos”, y tercero, para que nosotros no mal interpretemos lo que la otra persona en realidad dice, por lo que es importante no subestimarlo y decir “esa ya me la sé” sin antes escucharlo.8

Esto lo veo constantemente cuando los católicos romanos se acercan a increpar a los evangélicos porque “no creen en María”. En este caso, tú no deberías ir directo a la yugular, sacando todo un estudio acerca de la idolatría, eso sería una pésima estrategia apologética y evangelística. Lo que debes hacer en su lugar es preguntar “¿Qué quieres decir exactamente con que no creemos en María?” Porque para el católico “creer” viene a significar una especie de creencia salvífica o de intercesión, mientras que, para nosotros, la frase “creer en María” viene a significar en creer en ella como una figura histórica importante en la encarnación de Jesús; en este último sentido ¡nosotros sí creemos en María! Como puedes ver, nuestra primera pregunta busca resolver malentendidos y ya va dirigiéndose a refutar al contrario, haciéndole ver que no es correcto decir que los evangélicos “no creen en María”.

 

Otro ejemplo clásico, es con algunos no creyentes que dicen: “No creo en dios”. De nuevo, ante esto no deberíamos abalanzarnos a sacar nuestro repertorio de argumentos y nuestras testimoniales, eso es un error estratégico y muy prematuro ¿no crees? Lo primero y más correcto sería preguntar: “Disculpa, no entiendo, ¿a qué te refieres exactamente con “dios”? a lo que normalmente quizá contesten “un dios injusto, que no castiga al malvado” o “el dios del islam” y aclarado el punto, entonces diremos “¡Genial! Yo tampoco creo en ese dios”.

2. ¿Cómo ha llegado a esa conclusión?

Algunas variantes de esta pregunta son: ¿Por qué dice eso?; ¿Qué razones tiene para sostener ese punto de vista?; ¿Le parece que esa forma de pensar es correcta?; ¿Cómo sabe que x es correcto?; ¿Qué lo lleva a pensar eso?; ¿Qué le lleva a pensar que x es así?; ¿Eso piensa o lo leyó en algún lado?;” ¿Por qué debo creer lo que usted dice?”, etc.

Si la primera pregunta, tiene como propósito saber qué piensa el contrario, la segunda tiene la función de entender por qué piensa de este modo. Con esta pregunta, también le hacemos saber a nuestro interlocutor que él tiene la responsabilidad de demostrar lo que dice, a la vez que lo forzamos a dar una explicación para sus creencias. De hecho, puede que te sorprenda descubrir que gran parte de ellos, no están siquiera preparados para defender sus posturas. Recuerda que el hecho de que lo afirme con mucha seguridad, no significa que sea real, ya que una afirmación, no es un argumento.9

 

En la práctica, te puedes encontrar con personas que afirman: “Jesús no es Dios”, “Jesús es el ángel Gabriel”, “La Trinidad es un invento”, etc. ¿Qué debes hacer en este caso? ¡Preguntar! no caigas en su juego tratando de probarles con argumentos que están en un error, porque eso casi seguro no llevara a nada, por lo contrario, recuerda que ellos son los que afirmaron y, por lo tanto, ellos deben dar las razones, no tú; así que no te adelantes (ya vimos que nuestros argumentos a favor de la Trinidad son excelentes, pero no es el tiempo). Un principio general del Derecho es: “quien afirma, está obligado a probar” así que antes de desenfundar tu Biblia, pregunta: ¿podría probármelo? o intenta con una más cortés, ¿cómo ha llegado a esa conclusión?

3. ¿No ha pensado en esto?

Algunas variantes a esta pregunta son: ¿No sería mejor pensar esto?; ¿Alguna vez ha pensado que…?; Si lo que dice es así, ¿eso no implicaría que…?; ¿Puede ayudarme a entender esto…? y a continuación presenta tu objeción de forma que cuestione amablemente la creencia o ponga de relieve la debilidad que ves en el argumento.

Como dijimos, la primera pregunta (o primer tipo de preguntas), son para saber qué piensa el contrario; las segundas, tienen la función de entender por qué piensa de este modo; y las terceras, son un tipo de preguntas denominadas “preguntas guía” las cuales tienen la intención de informar, persuadir, convencer, poner de relieve una debilidad y todo con la meta final: llevar a la otra parte a que adopte nuestra postura.10

En una ocasión con una compañera del trabajo, pude notar que en su muñeca tenía algunas pulseras “místicas” y como yo sabía que ella se consideraba católica, le pregunté: -¿Qué significado tienen esas pulseras? -Atraen las fuerzas positivas -me contestó. E hice otra pregunta: -¿crees en Dios? -Sí. Y entonces recurrí a una pregunta guía- ¿No crees que si Dios es todopoderoso, cualquier otra cosa vendría a sobrar? –a lo que ella me contestó sorprendida: -Jamás lo había pensado de esa forma.

Koukl, posee un nivel más elevado de abstracción y aunado a que lleva practicando por años, hace esto con más destreza, por ello, a continuación, citaré tres ejemplos suyos del uso de este tercer tipo de preguntas:11

– ¿Ha pensado alguna vez que, si la Biblia estuviera escrita sólo por hombres, sería muy difícil explicar el cumplimiento de las profecías? ¿Cómo explicaría usted este fenómeno?

– ¿Puede ayudarme a entender lo siguiente? Si no hay ninguna evidencia de que la vida surgiera de la no vida (abiogénesis) -la vida sale espontáneamente de la materia inanimada y pone en marcha la secuencia de evolución- y sí muchas pruebas en contra, ¿cómo puede decirse que la evolución darwinista es un hecho?

– ¿Puede, por favor aclararme esta duda? Si la homosexualidad es verdaderamente natural, ¿Por qué habría dado la naturaleza a los hombres homosexuales cuerpos diseñados para mantener una sexualidad reproductiva con mujeres y luego deseos de tener relaciones sexuales con otros hombres? ¿Qué razón tendría la naturaleza para dar un deseo para una forma de sexualidad, pero un cuerpo para otra?

 

Esta táctica Colombo, si bien puede seguir el orden numérico en el que se enlistaron, no siempre será la regla, ya que una conversación no es lineal, sino que se ramifica, por lo que es probable que debamos usarlas en un orden diferente y emplear algunas más que otras. Para hacer un mejor uso de esta táctica, te presento 3 consejos prácticos que debes recordar:

1. No pierdas el control de la conversación, tú eres el que llevas el volante, no tu contrario.  Como dije, las conversaciones se van ramificando, pero es importante que saldes cada uno de los subtemas que salten en la charla y que no permitas que tu contrario cambie el tema de forma sutil o que se eludan las preguntas y para ello te puedes ayudar de “narrar el debate” que consiste precisamente en  explicarle a tu interlocutor la dirección que ha tomado la plática y resumirle las preguntas que hasta el momento le haz hecho y cómo es que él las ha contestado; esto para que no levante una cortina de humo, sino que sea confrontado a aceptar las consecuencias de sus propias respuestas.12 Los TJ son especialistas en querer tomar el volante y en cambiar el tema; pon atención a ello.

2. Pide evidencias. Esto es muy común en las redes sociales y se ha vuelto casi indispensable en esta era de “fake news”, siempre que tu contrario sostenga afirmaciones que no te cuadren, pregunta ¿cuál es la fuente?, ¿quién o qué respalda lo que dices? (recuerda la carga de la prueba).

3. Infórmate, conoce y si es necesario reconoce tu ignorancia. No importa que tan bueno seas en la aplicación de estas tácticas, si eres un ignorante sobre el tema a debatir. Yo puedo tener una gran intención y deseo para evangelizar a todo el mundo, pero si ni siquiera sé encontrar en la Biblia el evangelio según Mateo ¿cómo podría lograrlo? Es por eso que debes estar capacitado e informado, debes entender lo que piensa tu contrario y, sobre todo, entender lo que piensas tú y las razones por las que lo piensas. Recuerda que, la muralla china no se construyó de buenas intenciones; hubo un conocimiento arquitectónico detrás y mucho material.  Si llega el momento donde en serio te tomen por sorpresa, simplemente reconoce: “Suena interesante, por favor, permítame pensarlo/investigarlo más a fondo y después le doy una respuesta”. Esto no es una triquiñuela para salir del aprieto, debes tomarlo en serio e informarte.

 

En conclusión. El debate y la defensa de la fe es algo a lo cual Dios nos ha mandado. Para ello, es de mucha utilidad tener una estrategia y esto, no niega nuestra confianza en la soberanía de Dios. Concluimos, que al igual que Jesús, Sócrates, y otros expertos en el tema, la mejor táctica que podemos adoptar es la de preguntar.

Notas y Bibliografía:
[1] Vid. DOUGLAS, Wilson, Debate As a Christian Duty, 2013, [En línea][2] Vid. COLLINA, Beatrice, Sócrates: maestro de filosofía y de vida, EMSE, Barcelona, 2015, pp. 61-62.
[3]Vid. KOUKL, Gregory, Tácticas, Editorial Vida, Tennessee, 2018,pp. 50-51.
[4]Vid. Lc 20:26.
[5] Vid. Mt 21:23-27
[6] Vid. Mc 2: 6-12.
[7] Cfr. UNIVERSITY OF NEBRASKA LINCOLN, Socratic Questioning, 2020, [en línea][8] Vid. KOUKL, Gregory, Op. Cit., pp. 52-55.
[9] Ibid. pp. 64-66.
[10] Ibid. pp.76, 77.
[11] Ibid. pp. 89-90.
[12] Ibid. pp. 91-92.

 

Escritos

Jesús Resucitó: la mejor explicación de la evidencia

Autor:  Matt Bilyeu

El historiador Gary Habermas, tiene un gran acercamiento al acontecimiento conocido como: la resurrección de Jesús.  En lugar de tratar de luchar la batalla en todos los frentes, se centra en tres hechos básicos que son aceptados por la mayoría de los estudiosos del Nuevo Testamento y que no pueden ser explicados si no solo mediante de la resurrección.  Estos tres hechos son: 1. La tumba vacía. 2. Los informes de las apariciones post-mortem. 3. La creencia sincera de los discípulos.

Se infiere que Dios resucitó a Jesús de entre los muertos por estos tres hechos, dado que son como la mejor explicación de esta evidencia. Vamos a comprobar los hechos, para después, afirmar que la resurrección es la mejor explicación que se ofrece basada en unos pocos criterios simples.

El argumento se apoya de la Biblia, pero no siendo tomada como un documento inspirado.  Todo lo que necesitamos creer en relación con la Biblia, es lo que todo el mundo (incluso los eruditos ateos) cree y está de acuerdo. La Biblia es una colección de documentos que han sobrevivido desde el primer siglo. En apoyo de esto, podemos nombrar a Bruce Metzger, un erudito del Nuevo Testamento y profesor de Princeton, así como John A. T. Robinson, un ex profesor de Cambridge, que están de acuerdo en que el Nuevo Testamento que tenemos es más del 99% exacto a lo que los autores originales escribieron.1 Ahora bien, también barajamos la posibilidad de que los autores del Nuevo Testamento, no dijeran la verdad cuando escribieron esos documentos, pero por el momento,  podemos estar satisfechos con saber lo que escribieron y dejar lo otro para más tarde.

 

Hecho uno: La tumba vacía. En el interés de mantener esto breve, vamos a ver un par de cosas.  Primero, las mujeres seguidoras.  Si la tumba no estaba vacía, entonces se inventaron la historia de las mujeres que la descubrieron vacía. El problema es que, las mujeres en el antiguo Israel no eran consideradas testigos confiables, por lo que no es razonable pensar que los discípulos originales inventaran una historia sobre la tumba vacía e incluyeran sólo testigos poco confiables.  De hecho, si la historia de la tumba vacía fuera inventada, seguramente habrían incluido testigos “confiables” (es decir, de hombres).

Por otro lado, la historia del entierro es extraña si no ocurrió realmente.  Jesús fue enterrado en la tumba de José de Arimatea, un miembro del mismo consejo que condenó a Jesús.  No es razonable creer que los primeros cristianos fabricaran una historia sobre una persona buena y honorable entre el mismo grupo que llevó a cabo un asesinato judicial de su señor.  Parece razonable creer que Jesús fue enterrado en la tumba de Arimatea y que los primeros discípulos informaron de lo que pasó, aunque esto arrojara a un miembro del Sanedrín a una mirada compasiva.  Ahora bien, si la tumba no había estado vacía y, en cambio, todavía estaba ocupada por el cuerpo de Jesús, entonces ¿por qué Arimatea no presentó el cuerpo? Así él habría tenido un motivo para exonerarse a sí mismo y al Sanedrín, mostrando que Jesús aún estaba en la tumba.  Pero dado que Jesús fue enterrado en un lugar conocido por un miembro del mismo grupo que lo mató, se hace inexplicable por qué no se limitaron a presentar el cuerpo si todavía estaba allí, durante el surgimiento del cristianismo.

 

Hecho dos: Los informes de las apariciones post-mortem.  Es innegable que la gente reportó haber visto a Jesús.  Está registrado varias veces de múltiples fuentes diferentes en los documentos del Nuevo Testamento (Mateo, Lucas, Juan, Hechos, 1 Corintios, etc.).  Es más, los propios autores afirman haber visto a Jesús, y tenemos su registro escrito.  (Llegaremos a la explicación de que mintieron sobre ello más tarde, ahora mismo sólo queremos reconocer que de hecho afirmaron ver a Jesús.).

Hecho tres: La creencia sincera de los discípulos.  Este hecho también es innegable.  Los discípulos sufrieron persecución y murieron en lugar de retractarse de su fe. Alguien puede decir que se equivocaron sinceramente, pero no se puede decir que no fueran sinceros. Muchos pueden morir por lo que creen, pero nadie daría su vida por aquello que los consta, es falso.

Se podría decir mucho más en defensa de estos hechos, pero en aras de la brevedad lo dejaré ahí.  Lo siguiente, será explorar las explicaciones de estos hechos y determinar cuál es la mejor explicación.  La mayoría de los estudiosos estarán de acuerdo con los siguientes criterios para evaluar las pruebas históricas.2

  • Alcance explicativo: ¿La explicación explica todos los hechos?
  • Poder explicativo: ¿Qué tan bien explica la explicación los hechos?
  • Plausibilidad: ¿La explicación contradice las cosas que conocemos?
  • Ad Hoc: ¿La explicación requiere que adoptemos creencias no fundamentadas?

 

Cuando examinamos las alternativas con estos criterios, vemos que nada se acerca, excepto que Dios resucitó a Jesús de entre los muertos.  Piense en las explicaciones alternativas populares que se presentan a continuación:

Hipótesis de Conspiración: Los discípulos robaron el cuerpo.

Poder explicativo: Esto no explica la sinceridad de la fe de los discípulos.  Si mintieron sobre ello, ¿por qué morirían por la mentira?

Plausibilidad: Las teorías de conspiración tienden a desmoronarse.  ¿Por qué deberíamos creer que estos pescadores fueron capaces de lograr esto?

Hipótesis de alucinación: Los discípulos alucinaron con las apariciones de Jesús.

Poder explicativo: Esto podría explicar las apariciones y la sinceridad de los discípulos, pero ¿qué pasa con la tumba vacía?  Si las apariciones fueron sólo una alucinación, entonces la tumba aún tendría el cuerpo de Jesús en ella.  También hace un mal trabajo al explicar las apariciones.  Las alucinaciones son asuntos privados, ¿cómo explica esto las apariciones a los grupos?

Ad Hoc: Se nos pide que creamos que los discípulos eran mentalmente inestables, pero no hay evidencia de eso.  Recuerde que tenemos sus escritos y los escritos de sus discípulos.  No hay ninguna razón para creer que los discípulos estaban mentalmente trastornados.

 

Si se aplica la tabla de alcance explicativo, poder explicativo, plausibilidad y ad hoc se encontrará que nada se ajusta a la evidencia de la manera en que lo hace la resurrección.  Por esa razón, la resurrección es la mejor explicación de la evidencia y lo racional es creerla.

Notas y Biliografía del Autor:
1 Geisler, Norman L. Systematic Theology In One Volume. Bloomington, MN: Bethany House Publishers, 2011.
2 Craig, William Lane. On Guard: Defending Your Faith with Reason and Precision. Colorado Springs, CO: David C. Cook, 2010.

Fuente:
MATT BILYEU, The Resurrection Best Explains the Available Evidence, 2017, [En línea]:

Escritos

Si crees en la existencia del mal, entonces deberías creer en Dios

Autor: Matt Bilyeu

¿Recuerdas lo que hacías cuando te enteraste del atentado a las torres gemelas?  Recuerdo cuando encendí la televisión y vi el segundo avión chocando con la torre del World Trade Center.  Al principio pensé que tenía que ser una especie de preestreno de película y recuerdo la confusión que sentí cuando me di cuenta de que era real.

Estoy seguro de que no soy el único que se sorprendió por ese terrible ataque.  Ya sea una tragedia nacional o una angustia personal, este tipo de eventos nos recuerdan que hay un verdadero mal moral en el mundo.  Realmente existe algo como «bien» y «mal».  En este post mostraré que, si tú crees que hay una verdad objetiva de lo correcto y lo incorrecto, entonces también debe creer que Dios es real.

¿Por qué no puede haber moralidad en un universo sin Dios?

Como dice Norman Geisler, «Una ley moral es una prescripción, y las prescripciones vienen sólo de los prescriptores. A diferencia de las leyes de la naturaleza (que sólo son descriptivas), las leyes morales son prescriptivas: Las leyes morales no describen lo que es; prescriben lo que debería ser.»[1] Cuando pensamos en la ley de la gravedad, nunca consideramos si un objeto elegirá desobedecerla.  Los objetos caen y caerán como siempre lo hacen. La gravedad no describe cómo deben caer los objetos, sino que describe cómo caen.  Si un objeto cayera de forma diferente a la que esperas, no dirías que el objeto está equivocado, dirías que tu fórmula para la gravedad está equivocada.

 

Cuando se trata de moralidad, encontramos algo más.  Encontramos una descripción de cómo deberían ser las cosas, incluso si no lo son.  La gente debería amarse, aunque no lo haga.  Si los hombres odian en vez de amar, no decimos que nos equivocamos en la ley moral, sino que esos hombres se equivocan.  ¿De dónde vienen estas cosas?  Sólo algo que tiene capacidad de visión puede describir lo que no existe, pero debería, y sólo las personas pueden tener esa capacidad.

Si imaginamos un mundo sin Dios, podemos ver otras razones por las que estaría vacío de moralidad.  Un mundo así no tendría ningún propósito, ni libre albedrío, ni responsabilidad moral.  Sin estas cosas, no puede haber un verdadero significado de «lo correcto» y «lo incorrecto».

Propósito

Sin Dios, la humanidad sólo se produjo por un proceso de evolución sin sentido y sin guía.  No había un propósito particular para nuestra existencia, simplemente existimos. En otras palabras, no hay nada a lo que la humanidad esté destinada, no hay forma de que la gente deba estar.  No fuimos hechos para ser morales ni para ser inmorales.  No fuimos hechos en absoluto, así que no hay un modelo ideal que debamos cumplir.  Como la existencia de la humanidad no tiene ningún objeto ni propósito, no podemos fallar nunca.  No hay ningún objetivo que debamos alcanzar.

Libre albedrío

 

También es difícil ver por qué debería haber libre albedrío si Dios no existe.  En ese caso, nuestras mentes son sólo los productos de la química en nuestros cerebros, nuestros estados mentales son sólo los estados de nuestro cerebro o son los productos de nuestros estados cerebrales.  El estado químico del cerebro, sin embargo, está determinado por las leyes de la física y la química.  Por lo tanto, no hay un significado real para decir que alguien ha elegido «mal». No podrían haber hecho otra cosa. Dado que sólo elegimos lo que estamos destinados a elegir por nuestra química cerebral, no hay opciones reales en absoluto, correctas o incorrectas.

Responsabilidad moral

Finalmente, podemos ver que no hay responsabilidad moral si Dios no existe.  Cuando morimos, simplemente dejamos de serlo. No hay recompensa o castigo futuro por la forma en que hemos vivido nuestras vidas.  Podríamos haber sido tan buenos como Jesús o tan malos como Adolf Hitler, y al final todos vamos al mismo lugar.  Al final no hay ninguna diferencia en cómo hemos vivido.

Como no hay propósito, ni libre albedrío, ni responsabilidad moral, entonces no puede haber valores o deberes morales objetivos y significativos.  William Lane Craig lo expresa mejor cuando dice: «[Los hombres y las mujeres son] sólo subproductos accidentales de la naturaleza que han evolucionado hace relativamente poco tiempo en una infinitesimal mota de polvo llamada planeta Tierra, perdidos en algún lugar de un universo hostil y sin sentido, y que están condenados a perecer individual y colectivamente en un tiempo relativamente corto»[2] Si Dios no existe, entonces la vida es en última instancia absurda y no hace ninguna diferencia lo que hagamos.

 

Entonces, ¿por qué creer que la moralidad es real?

La realidad es que experimentamos la moralidad todo el tiempo.  Tenemos este sentido ineludible de que ciertas cosas están bien o mal.  No sólo nos disgustan cosas como la violación y el asesinato, sino que pensamos que otros no deberían cometer tales crímenes.  Cuando tenemos la sensación de que otras personas deben hacer lo correcto, sentimos una ley objetiva que se aplica a todas las personas.

Piensa en tu pizza favorita.  No crees que a los demás les deba gustar tu ingrediente favorito o que estén haciendo algo malo si no lo hacen.  Esto se debe a que nuestra experiencia con las coberturas de pizza es subjetiva, parece que sólo se aplica a nosotros mismos.  Tenemos la experiencia opuesta con la moral, nos parece que todas las personas deben hacer lo correcto.  Nuestro sentido de la moralidad no puede ser cuantificado o medido, sólo se experimenta de primera mano.  Como dice Craig, «Supongo que en la experiencia moral aprendemos un reino de valores y deberes morales objetivos, así como en la experiencia sensorial aprendemos un reino de objetos físicos objetivamente existentes». [3]

Así que debemos creer en los valores morales objetivos y en los deberes porque los experimentamos de primera mano. Como dice Paul Copan, «Parece que deberíamos creer razonablemente en lo que es aparente u obvio para nosotros a menos que haya razones de peso para descartarlo». [4] Por lo tanto, Dios existe.

En conjunto, nuestra línea de pensamiento aquí, se puede resumir de esta manera:

 

1.         Si Dios no existe, los valores y deberes morales objetivos no existen.

2.         Los valores y deberes morales objetivos sí existen.

3.         Por lo tanto, Dios existe.

La premisa uno es verdadero porque sin Dios no hay propósito, ni libre albedrío, ni responsabilidad moral.  Sin estas cosas no puede haber un significado objetivo real para la moralidad.  Parece que tenemos buenas razones para creer en la premisa dos también por nuestra experiencia de primera mano.  De esto se deduce que Dios existe.

Notas y Bibliografía:
[1] Norman Geisler, Systematic Theology in One Volume (Bloomington: Bethany House Publishing, 2011), pg 29.
[2] William Lane Craig, Reasonable Faith: Christian Truth and Apologetics (Wheaton: Crossway Books, 2008), pg 172.
[3] ibid, pg 179.
[4] Paul Copan, The Moral Argument in Philosophy of Religion: Classical and Contemporary Issues edited by Paul Copan and Chad Meister (Malden: Blackwell Publishing, 2008), pg 129.

Fuente:

Matt BilyeuIf You Believe in a Moral Right and Wrong, You Should Believe in God., 2018, [En línea]

Escritos

El Big-Bang representa un Gran-Problema para el ateo

Autor: Matt Bilyeu

No hay tal cosa como un almuerzo gratis, o un universo gratuito.  Uno de los mayores problemas para los ateos es que el universo tuvo un comienzo.  Sabemos que no se puede obtener algo de la nada (esto es un principio metafísico evidente), así que ¿de dónde vino el universo?  Este es un gran problema para cualquiera que piense que el universo es todo lo que hay.

Los filósofos platearán este tipo de argumento (cosmológico) de esta manera:

1) Todo lo que comienza a existir tiene una causa.
2) El universo comenzó a existir.
3) Por lo tanto, el universo tiene una causa.

Todo lo que comienza a existir tiene una causa.

Como dijimos antes, no hay tal cosa como un almuerzo gratis.  Si algo puede venir de la causa y el efecto de nada, entonces cabría preguntarnos ¿por qué no vemos aparecer a la existencia, cualquier cosa de la nada?, ¿por qué sólo los universos y por qué sólo una vez? Toda nuestra experiencia está a favor de esta premisa, así que ciertamente parece más razonable aceptarla que rechazarla. 

Algunos pueden intentar decir que sólo sabemos que las cosas dentro de nuestro universo necesitan una causa, así que ¿cómo podemos saber que el propio universo necesita una causa?  Este tipo de objeción, se puede superar señalando que no estamos tratando de probar nada, sólo decimos que es más razonable creer en la causa y el efecto a negarlo.  Toda nuestra experiencia está a favor de la causa y el efecto, así que, ¿qué razón tenemos para rechazarlo por el Big Bang?

 

El universo comenzó a existir.

No es probable que mucha gente dude de esto.  Piensa en lo que significaría si el universo nunca empezara a existir.  El tiempo se extendería para siempre en el pasado. Si ese fuera el caso, entonces habrían existido eventos tan lejanos en el pasado que una cantidad infinita de tiempo ha pasado desde que ocurrieron.  ¿Pero cómo puede ser eso? Si hubiera una cantidad infinita de tiempo entre algún momento del pasado y el presente, entonces nunca se convertiría en el presente, no importa cuánto tiempo haya pasado.  Siempre habría más tiempo que tenía que pasar primero. ¡Pero estamos en el ahora! Esto nos da una buena razón para pensar que no hay un momento infinitamente lejano en el pasado y que el tiempo no ha estado corriendo por siempre.  El tiempo mismo debe haber tenido un comienzo, lo que significa que el universo tuvo un comienzo.

Incluso si alguien sugirió algún ámbito de existencia superior que creara nuestro universo (como el multiverso) el tiempo aún tenía que tener un comienzo absoluto.  El tiempo todavía no podría haber estado corriendo para siempre.  Esto también se aplicaría al multiverso. No hay forma de escapar de él, el universo tuvo un comienzo absoluto.

Por lo tanto, el universo tiene una causa.

Podrías preguntarte, espera un momento, ¿qué tiene que ver todo esto con Dios?  Pues bien, ten en cuenta que cualquier causa que trajo el universo a la existencia tiene que trascender el universo.  No puede estar hecho de materia si trajo la materia a la existencia. También debe haber sido intemporal ya que trajo el tiempo a la existencia.  Esto significa que tuvo que ser sobrenatural (más allá de la naturaleza tal como la conocemos). Puesto que podemos inferir lógicamente que un creador inmaterial, intemporal y sobrenatural trajo el universo a la existencia, entonces parece razonable creer en Dios.  Ciertamente, él encajaría en la cuenta.

Se han levantado varias objeciones al argumento Cosmológico Kalam planteado por el filósofo William Lane Craig, pero hasta el momento ninguna ha probado ser buena.

Fuente:
MATT BILYEU, The Big Bang is a Big Problem for Atheism, 2017, [En línea]

Escritos

Lista de sesgos y factores para la toma de elección para la apologética.

Autor: Psic.Jay Medenwaldt

En mis conferencias de Apologética, le pido a la audiencia que griten tantas falacias lógicas como puedan en 15 segundos y normalmente enumeran unas siete. Luego les pido que griten todos los sesgos psicológicos que puedan y sólo dicen sesgo de confirmación y nada más. La gente generalmente parece más consciente de las falacias y las reconoce correctamente como errores de razonamiento, pero pocas personas son conscientes del enorme número de factores psicológicos que afectan a cada una de nuestras decisiones.

Cuando empecé a estudiar psicología y apologética, pensé que las personas eran seres racionales. Rápidamente descubrí que no somos tan racionales como pensamos. Sin embargo, no fue hasta años de estudio de los prejuicios y la experiencia de interactuar con la gente que me ayudó a darme cuenta de que las personas están lejos de ser racionales. Sin embargo, la cosa es así: podemos ser racionales, pero cuando se trata de temas como la religión, la política o cualquier otro tema con carga emocional, se requiere mucho trabajo para ser racional. Necesitamos la paciencia para no emitir juicios prematuros, necesitamos el coraje para enfrentar nuestras emociones y desafiar la visión estándar de nuestros grupos sociales, y necesitamos la humildad para admitir que podemos estar equivocados o ser ignorantes.

A continuación, hay una lista de todos los factores psicológicos ampliamente aceptados que podría encontrar que influyen en nuestro razonamiento, por lo general de una manera no racional. La mayoría, si no todos estos sesgos son inconscientes, así que ni siquiera podemos saber si nos están afectando. Sabemos que existen gracias a inteligentes experimentos de los psicólogos. Estos son los factores que debemos superar cuando tomamos decisiones y los factores que debemos ayudar a los demás a evitar cuando hacemos apologética. Lo que resulta especialmente interesante es que después de que la gente se da cuenta de estos factores, casi siempre dicen que no les ha afectado, pero los datos no mienten.

Lo que es único de esta lista en comparación con otras que se pueden encontrar en Internet es que utilizo ilustraciones que las presentan en el contexto de la apologética y he cruzado referencias de cada factor con otros relacionados y falacias. Esta lista está pensada para ser una referencia para mí y para cualquiera que quiera usarla.

Efecto Heurístico: Tender a confiar en nuestras emociones actuales para tomar decisiones rápidas. El disgusto es particularmente poderoso para las decisiones morales. Cuando tomamos decisiones basadas en nuestras emociones, normalmente damos razones post hoc (después del hecho) para nuestra decisión.

    – El mismo o casi el mismo estilo cognitivo intuitivo.

    – Relacionado con una apelación a las emociones.

Efecto de anclaje: Cuando tenemos un valor o una representación en nuestra mente, este se convierte en el estándar por el cual juzgamos otras opciones, incluso si es arbitrario. En otras palabras, este valor o creencia se convierte en su ancla de cómo juzga otras cosas en relación.

 – Igual o casi igual que la coherencia arbitraria.
    – Relacionado con enmarcado e imprimación. 

Apophenia: la tendencia a ver patrones, significados o conexiones al azar. Básicamente, se trata de ver formas en las nubes o encontrar códigos ocultos en la Biblia. En apologética, los creyentes son acusados ​​de esto cuando afirman que hay un diseño en el universo. Sin embargo, la misma crítica puede estar dirigida a la evolución, por lo que ambas partes deben argumentar que no están siendo víctimas de este sesgo.

   – Lo mismo o casi lo mismo que la agenticidad, la paternicidad, la ilusión de agrupamiento, la falacia de la mano caliente y la pareidolia.
    – Relacionada con la falacia de la causa falsa (también conocida como falacia causal), la falacia del jugador.

Coherencia arbitraria: la tendencia a formar una opinión o argumento coherente basado en un valor arbitrario. Una vez que se acepta un valor arbitrario, la gente tiende a actuar de manera coherente basándose en ese valor.

   – Igual o casi igual que el efecto de anclaje.
    – Relacionado con enmarcado e imprimación

Disponibilidad heurística: la tendencia a tomar decisiones o sacar conclusiones basadas en los datos que escuchamos con más frecuencia o más recientemente en lugar de una comparación sistemática de todos los datos.

– Igual o casi igual que la falacia de la tasa base.
    – Relacionado con el efecto de falso consenso, selección selectiva (falacia), atención selectiva, percepción selectiva.

Falacia de tasa base: La tendencia a ignorar la probabilidad base (promedio) de que algo ocurra a favor de información nueva o fácilmente disponible. Un ejemplo de esto es cuando alguien señala una mutación como evidencia de evolución, pero descuida la tasa promedio extremadamente baja de mutaciones beneficiosas, especialmente mutaciones beneficiosas que insertan nueva información en el genoma.

  – Igual o casi igual que la heurística de disponibilidad

    – Relacionado con la heurística de selección selectiva (falacia), de mano caliente, regresión a la media, heurística de representatividad.

Sesgo de creencias: La tendencia a evaluar argumentos basados ​​en lo que ya creemos más que en la solidez de las premisas. En otras palabras, para racionalizar, ignorar o malinterpretar argumentos que refutarían lo que ya creemos. Si creemos en una conclusión, negaremos cualquier premisa que no apoye nuestra conclusión sin una cuidadosa consideración de ella.

    – Igual o casi igual que la racionalización.

    – Relacionado con la afirmación del consecuente (falacia), la perseverancia de creencias, el sesgo de confirmación y la falacia del hombre de paja.

Perseverancia de creencias: la tendencia a mantener una creencia incluso frente a pruebas contrarias.

    – Lo mismo o casi lo mismo que la perseverancia de creencias y la polarización de grupo.

    – Relacionado con el sesgo de creencia, sesgo de confirmación.

Blindspot Bias: La tendencia de las personas a verse a sí mismas como menos susceptibles a los prejuicios que otras personas. Es más probable que este afecte a personas con alto coeficiente intelectual o educación. Como anécdota, he notado que las personas que se han convertido o desconvertido como adultos tienden a ser culpables de esto al pensar que han trascendido por encima del prejuicio.

    – Igual o casi igual que el sesgo egoísta.

    – Relacionado con sesgo de creencias, perseverancia de creencias, sesgo de confirmación.

Efecto del espectador: La tendencia a no responder a una situación cuando hay una multitud de personas que tampoco responden. Cuando vemos un automóvil al costado de la carretera, no nos detenemos a ayudar porque nadie más se detiene para ayudar. Este efecto ocurre porque no queremos destacar, racionalizar que tal vez no nos necesiten, o realmente pensamos que podríamos estar equivocados y que todos los demás tienen razón. En apologética y teología, esto es cuando vemos que otras personas aceptan comportamientos pecaminosos para que no tratemos de detenerlos (siempre y cuando estemos en el papel adecuado para hacerlo).

    – Lo mismo o casi lo mismo que una apelación a la mayoría (falacia) o falacia del carro.

    – Relacionado con la disponibilidad heurística, efecto de falso consenso, normalización, efecto de foco, desensibilización sistemática.

Facilidad cognitiva: Es más probable que aceptemos algo o nos guste si es fácil de procesar. Esto incluye el contenido, la forma en que se presenta el contenido y el medio utilizado para presentarlo. Usar una fuente clara al escribir, hablar lo suficientemente alto para que la gente lo escuche, videos de alta resolución y simplificar un concepto complejo son solo algunas formas de aprovechar este sesgo.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con la mera exposición

Disonancia cognitiva: La sensación de incomodidad que sentimos cuando tenemos creencias inconsistentes o cuando nuestras acciones no se alinean con nuestras creencias. Cuando nuestras acciones y creencias son inconsistentes, generalmente cambiamos de opinión para alinearnos con nuestras creencias porque son más observables, por lo que la gente no reconocerá nuestra hipocresía. Esto se puede usar en apologética para mostrar que las preocupaciones morales de una persona (ambientalismo, política, derechos humanos, etc.) no se alinean con sus creencias porque no hay moralidad objetiva sin Dios.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con el

Sesgo de compromiso: La tendencia a ceñirnos a lo que ya estamos haciendo o ya creemos, incluso cuando nuevas pruebas sugieren que deberíamos cambiar. Cualquiera que tenga un firme compromiso con sus creencias actuales acerca de Dios es susceptible a esto.

    – Lo mismo o casi lo mismo que la escalada del compromiso, la generalización apresurada (falacia), el compromiso cognitivo prematuro, la falacia del costo hundido.

    – Relacionado con la apelación a la autoridad, el efecto contraproducente, la técnica del pie en la puerta, el auto-pastoreo, el sesgo del status quo Control compensatorio  – Cuando perdemos el control en una situación o dominio, intentamos compensar obteniendo el control en otra área . Durante un año electoral cuando hay incertidumbre política, las personas religiosas tienden a ver a Dios como quien tiene más control que durante los años no electorales. Obtenemos control compensatorio a través del trabajo, la rutina, la crianza de los hijos y muchos otros dominios. – Igual o casi igual que    

    – Relacionado con el apego

Sesgo de confirmación: se ha convertido en un término bastante amplio para describir cualquier sesgo, acción o cosa que nos ayude a confirmar lo que ya creemos. Puede tomar la forma de buscar solo evidencia confirmatoria (en contraposición a evidencia que potencialmente refuta nuestro punto de vista), olvidar o ignorar evidencia que no respalda nuestro punto de vista, o interpretar la evidencia de una manera retorcida para ajustarse a nuestro punto de vista.

    – Igual o casi igual que el sesgo de creencias, perseverancia de creencias, sesgo de mi lado

    – Relacionado con la heurística de disponibilidad, el efecto contraproducente, la selección de cerebros (falacia) y casi todo lo demás.

Efecto de contraste: La tendencia a juzgar algo en comparación con algo que vino inmediatamente antes. Si da un argumento o una presentación después de otra persona, la calidad de lo que diga será juzgada en comparación con la persona que habló antes que usted. Esto puede ayudar y doler en apologética dependiendo de la persona que fue antes que usted. Esto puede aplicarse a la calidad de sus videos, el diseño de su sitio web, entrevistas, conversaciones en persona o en línea, y casi en cualquier otro lugar.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con el anclaje, coherencia arbitraria

 

Fatiga de decisión: a medida que tomamos más y más elecciones a lo largo del día, nos fatigamos más mentalmente y estamos menos dispuestos a poner el esfuerzo cognitivo para tomar decisiones cuidadosas. Si este efecto existe es un tema muy debatido. Un artículo reciente sugiere que existe, pero no tan ampliamente como se pensó originalmente. En apologética, esto puede entrar en juego si le haces demasiadas preguntas difíciles a alguien. Es posible que simplemente se cansen de responder y dejen de intentarlo, en cuyo caso pueden simplemente irse, recurrir a insultos o responder sin pensar (ver otros prejuicios).

    – Igual o casi igual que el agotamiento del ego

    – Relacionado con el

Efecto señuelo: Cuando hay dos opciones competitivas, la opción señuelo es como una de ellas pero menos deseable, por lo que la que se parece mejor parece. Por ejemplo, si le vendo una hamburguesa con papas fritas por $ 5 y un sándwich de pollo con papas fritas por $ 5, puedo agregar un señuelo para que una se venda mejor que la otra. Si tengo un montón de hamburguesas a punto de echarse a perder, puedo dar la opción de una hamburguesa solo por $ 4.50, lo que hace que la hamburguesa con papas fritas parezca más deseable. Sospecho que esto podría ser parte de la razón por la que algunas personas son espirituales pero no religiosas. Básicamente, eligen entre elegir entre el ateísmo, la religión sin reglas y la religión con reglas, y para muchas personas, la religión organizada sirve como señuelo para empujar a las personas hacia el espiritismo en lugar del ateísmo. Debo señalar que esto es solo una hipótesis mía o una aplicación potencial de este efecto.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con el anclaje del efecto 

 

Drop-in-the-Bucket: La tendencia a no hacer nada cuando nuestros recursos no pueden tener un impacto significativo en la solución de un problema. A veces no uso esto cuando hablo de adopción. Cito la gran cantidad de niños que necesitan ayuda, que es un problema que ninguna persona puede solucionar, por lo que la gente no está motivada para involucrarse. Si me enfocara más en niños individuales que necesitan ayuda, es más probable que las personas se emocionen y hagan algo para ayudar a ese niño. En apologética, es importante recordar esto cuando se habla de cuestiones morales. La gente estará mucho más preocupada si hay una víctima identificable.     – Igual o casi igual que el efecto de víctima identificable     – Relacionado con viveza, vaguedad

Efecto Dunning-Kruger
: Mi sesgo favorito porque creo que explica gran parte del mundo. Ésta es la tendencia de las personas con conocimientos o experiencia mínimos en un área a tener una confianza extremadamente alta en su capacidad en esa área. A medida que adquieren experiencia genuina, su confianza disminuye antes de comenzar a escalar nuevamente. Esto es apologética. Casi todo el mundo piensa que es un experto en religión y ciencia, de modo que cuando intentas tener una conversación de apologética, no están dispuestos a escuchar ni a considerar lo que se dice porque se ven a sí mismos como expertos. El documento original para esto se llama «No calificado y no consciente».

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con la humildad (opuesto), el hombre de paja (falacia).

Agotamiento del ego: consulte el comentario anterior para la fatiga de decisiones. Son los mismos. La única diferencia posible es que el agotamiento del ego se expresa en términos de fuerza de voluntad y lo compara con un músculo que puede fatigarse a corto plazo pero que puede entrenarse para fortalecerse con el tiempo. El problema con este efecto es que no siempre aparece cuando se esperaba, lo que hizo que la gente dijera que no es un efecto real. La investigación muestra que, en esencia, se puede superar fácilmente, por lo que, si ese es el caso, es algo real. La solución parece ser que afecta si decidimos hacer un esfuerzo cognitivo para tomar una decisión. Si nos esforzamos, no hay efecto, pero si decidimos no esforzarnos, nos volvemos muy propensos a cualquier otro sesgo que se enumera aquí.

    – Igual o casi igual que la fatiga de decisiones

    – Relacionado con el

Efecto de dotación: la tendencia a sobrevalorar algo que poseemos simplemente porque es nuestro. Nuestras cosas tienen recuerdos y emociones que otras personas no ven ni valoran. La idea básica parece aplicarse también a las cosmovisiones, las prácticas religiosas, los pecados personales y los grupos sociales. Estas cosas son nuestras y son parte de nosotros y no queremos renunciar a ellas fácilmente.

    – Igual o casi igual que el mero efecto de propiedad.

    – Relacionado con sesgo de compromiso

Efecto de falso consenso: La tendencia a pensar que algo es más normal de lo que realmente es. El ejemplo clásico es el sexo prematrimonial en la escuela secundaria. La gente, especialmente los estudiantes de secundaria, piensa que «todo el mundo lo está haciendo», pero la investigación muestra que más de la mitad de los estudiantes de secundaria todavía son vírgenes cuando se gradúan. El ejemplo más común de la apologética es la tendencia que tiene la gente a pensar que los científicos o intelectuales son más ateos de lo que realmente son.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con la heurística de disponibilidad, apelar a la mayoría (falacia)

Efecto de enfoque: La tendencia de las personas a centrarse en un pequeño detalle o un aspecto de algo en lugar de la imagen general. En palabras comunes, es perder el bosque por los árboles. Esto sucede en la apologética cuando la gente se obsesiona con detalles que a menudo son irrelevantes o no están dispuestos a ir más allá de un tema determinado. Por ejemplo, un escéptico puede concentrarse tanto en el mal que no está dispuesto a reconocer el punto más amplio de que no existe el mal sin un legislador moral o que hay otros argumentos que muestran que Dios existe.

    – Igual o casi igual que la heurística de disponibilidad, selección selectiva (falacia)

    – Relacionado con la heurística afectiva, sesgo de confirmación, pista falsa (falacia) 

Efecto Forer: La tendencia de las personas a aceptar declaraciones muy amplias o generalizadas sobre su personalidad como si fueran únicamente verdaderas para ellos, en lugar de reconocer que son en gran parte ciertas para la mayoría de las personas. Esto básicamente explica la tendencia actual del eneagrama, aunque no es científicamente válido. Esto puede jugar un papel en la apologética porque las personas pueden ser susceptibles de verse a sí mismas de una manera que podría ser beneficiosa o dañina para las conversaciones de apologética. Tratar de preparar a las personas para que se vean a sí mismas como pensadores racionales y cuidadosos, personas respetuosas, etc., puede ayudar a establecer conversaciones para que sean más efectivas.

    – Igual o casi igual que el efecto Barnum

    – Relacionado con la heurística de disponibilidad, sesgo de confirmación, sesgo egoísta

Efecto de encuadre: 
La forma en que algo se presenta, o se enmarca, puede afectar nuestras conclusiones al respecto. Por ejemplo, 99% de efectividad suena mejor que decir que solo falla el 1% de las veces. En una de mis presentaciones, muestro un clip de Brain Games donde un policía pregunta a los testigos qué tan rápido iba un automóvil cuando chocó / chocó contra el otro vehículo. Al cambiar solo una palabra, los testigos informan velocidades drásticamente diferentes. En apologética, nuestras palabras importan. Cuando enmarcamos otra cosmovisión como ridícula, aquellos que están de acuerdo con nosotros y algunos en el medio probablemente la encontrarán muy convincente; sin embargo, los incrédulos sentirán que no estamos representando honestamente su punto de vista y pasarán por alto lo que decimos. Otro ejemplo es cómo presentamos el cristianismo. ¿Lo presentamos de manera positiva para que la gente quiera seguirlo o simplemente somos conocidos por todas las cosas que hacemos? estás en contra? Las personas son más propensas a aceptar algo, o al menos a escuchar cuando se presenta de una manera mayoritariamente positiva (por no decir que no puedes o no debes mencionar las luchas de ser cristiano).

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con la heurística del afecto, apelación a las emociones (falacia), coherencia arbitraria, error de atribución fundamental (FAE)

Fijación funcional: Esta es la tendencia de las personas a ver algo solo para los fines previstos, lo que nos impide viendo usos alternativos. La capacidad de romper este patrón es lo que hizo popular a Macgyver. En otras palabras, este sesgo es pensar dentro de la caja, por lo que el antídoto (como si fuera así de fácil) es pensar fuera de la caja. En apologética, encuentro que la gente a veces tiene una visión fija de lo que es el cristianismo o cuál es su identidad («Soy médico y los médicos no son religiosos») que les impide ver a Jesús. Si nota que esto podría ser un problema, es fácil de superar siempre que no lo haga.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con la heurística de disponibilidad, creatividad, sesgo de confirmación

Error de atribución fundamental (FAE): Aquí es cuando cometemos un error al atribuir algo a alguien o algo. Por lo general, se usa para referirse a culpar a las personas (atribución personal) por cosas que no estaban bajo su control, o que no estaban completamente bajo su control, y luego a menudo asociamos el acto con su carácter. Si interrumpe a alguien en el tráfico, incluso si fue una emergencia o si, sin saberlo, se desvió hacia su carril, probablemente lo culparán por ello y si tiene una calcomanía de Jesús en su automóvil, le pasarán ese juicio. Del mismo modo, si comete un error sobre un hecho (o ellos creen que se equivoca), lo atribuirán a su carácter y probablemente a su inteligencia. Por eso es extremadamente importante tener cuidado con nuestras palabras, verificar todo y hablar con los demás con gracia.

    – Igual o casi igual que el sesgo de correspondencia

    – Relacionado con la falacia de causa falsa (también conocida como falacia causal), sesgo de confirmación, generalización apresurada (falacia), sesgo egoísta 

Polarización de grupo: La tendencia a que las opiniones de dos grupos se alejen más después de discutir el tema. El ejemplo obvio es la política. Digamos que un grupo de demócratas y republicanos tienen puntos de vista ligeramente diferentes sobre un tema cuando inician una conversación al respecto. Después de la conversación, es probable que se separen más. Esto sucede por una variedad de razones, algunas racionales y otras no. Hablar sobre el tema puede ayudarlos a pensar más en él, ayudándolos a darse cuenta de que su punto de vista anterior era inconsistente o mal pensado. Sin embargo, también puede deberse a reacciones instintivas contra el otro grupo, una falta de voluntad para comprometerse y parecer débil, siguiendo a un líder carismático, o muchas otras razones. En apologética, esto puede suceder en discusiones grupales entre cristianos y otros grupos o durante debates. Para superar esto, Es importante ser respetuoso con los demás y entablar relaciones para que no te vean como un enemigo que necesita ser derrotado. Es muy difícil para alguien estar de acuerdo con una persona que ve como un enemigo, incluso cuando es de sentido común. Tenemos una reacción automática de estar en desacuerdo con enemigos o personas que no nos agradan.

    – Igual o casi igual que el efecto contraproducente

    – Relacionado con la heurística afectiva, el sesgo de compromiso, la conformidad, el pensamiento de grupo, el sesgo de dentro / fuera del grupo, el agrado, la obediencia a la autoridad.

Pastoreo: la tendencia a seguir a la multitud como si fuéramos una manada. Esta es una heurística muy útil, especialmente en lugares desconocidos (por ejemplo, viajar a un nuevo país), pero a menudo puede llevar a conclusiones falsas. Mucha gente tiene opiniones falsas sobre el cristianismo debido a esto. Obtienen su teología de los medios de comunicación populares, lo que los lleva a pensar que el cristianismo está intelectualmente en bancarrota y que la fe es ciega, por lo que simplemente están de acuerdo con la multitud. Esto se relaciona especialmente con la sexualidad y el género.

    – Igual o casi igual que la apelación de la mayoría, falacia del carro, efecto de falso consenso

    – Relacionado con el sesgo dentro del grupo / fuera del grupo, el sesgo de auto-pastoreo en

Retrospectiva: La tendencia a considerar los eventos del pasado como obviamente predecibles. En otras palabras, miramos cosas pasadas con las anteojeras puestas debido a cambios en la cultura o un mayor conocimiento sobre algo. Hoy vemos la esclavitud como algo malo, y con razón, pero debido a que está tan arraigado culturalmente en nosotros, los escépticos a veces tienen dificultades para entender la esclavitud que se discute en la Biblia.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con el sesgo afectivo, la disponibilidad heurística.

 

Falacia de mano caliente: Esto se discute a menudo en términos de baloncesto, que es como se descubrió. Los investigadores descubrieron que cuando se percibe que una persona está en una buena racha y los observadores piensan que es más probable que esa persona haga el siguiente disparo; sin embargo, los datos muestran que este no es el caso. La relevancia de esto en apologética es que nuestras intuiciones inmediatas no siempre son correctas. Al observar las tasas de aborto, los efectos del control de armas, el crimen y la religiosidad, etc., no podemos simplemente citar una estadística y dar una explicación simple (esto se aplica a personas de todos los lados). A veces, la conclusión obvia es correcta, pero debemos buscar otros datos y la mejor explicación para algo.

    – Igual o casi igual que la apofenia, regresión a la media.

    – Relacionado con el sesgo de punto ciego.

Efecto de víctima identificable: la tendencia a ser más compasivo con una sola persona necesitada que con un grupo grande de personas. Aunque parece que deberíamos estar más desconsolados por un millón de personas hambrientas que solo por una, la investigación muestra que es más probable que actuemos y demos más por una sola persona que por un grupo. Es por eso que muchas organizaciones benéficas contarán con una sola persona necesitada en lugar de un grupo completo.

    – Igual o casi que

    – Relacionado con el efecto gota a gota, la viveza, la vaguedad

Efecto Ikea: Cuando damos más valor o importancia a algo que construimos. En apologética, si le cuentas a alguien la evidencia del cristianismo y le das la respuesta, es probable que sienta que tu respuesta no es tan buena como la de ellos porque no se le ocurrió y, por lo tanto, se resistirá a ti. Un mejor enfoque podría ser contarle a la gente ciertos hechos o crear hipótesis basadas en los hechos y luego pedirles que lleguen a una conclusión basada en esos hechos.

    – Igual o casi igual que el efecto de dotación, mero efecto de propiedad, efecto no inventado aquí (NIH)

    – Relacionado con la falacia genética

Ilusión de control: La tendencia a sobreestimar nuestra capacidad para controlar las cosas. Esto afecta a los cristianos que podrían pensar que tienen más control sobre las creencias de otra persona del que realmente tienen. Esto parece ser parte de la ecuación para las personas que quieren impulsar leyes gubernamentales que restrinjan los comportamientos que no se alinean con el cristianismo con el supuesto de que será más efectivo de lo que realmente es. Esto no significa que no haya lugar para leyes que restrinjan ciertos comportamientos, pero es la sobreestimación de la efectividad de estas leyes lo que constituye el sesgo.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con la apofenia, control compensatorio, falacia del jugador, superstición,

Efecto de verdad ilusoria: La tendencia a creer en información falsa es cierta después de escucharla una y otra vez. Esencialmente, no es lo correcto lo que se recuerda, sino el contenido, por lo que cuando las personas lo recuerdan, lo recuerdan como verdadero, a menos que, por supuesto, lo reconozcan explícitamente como falso y lo critiquen. La principal conclusión de la apologética es que es probable que las personas rechacen los argumentos apologéticos cuando son nuevos para ellos. Esto significa que no necesitamos ser agresivos o autoritarios con las personas. Podemos y debemos tener una visión a largo plazo y darles algo para masticar una y otra vez. El objetivo no es hacer que crean información falsa, sino ayudar a eliminar una barrera emocional a algo que parece nuevo y extraño.

    – Igual o casi igual que el simple efecto de exposición

    – Relacionado con la apelación a la mayoría, efecto de falso consenso

Imaginación Inflación: Tendemos a exagerar poco a poco los eventos pasados ​​cada vez más con el tiempo. Es por eso que bromeamos sobre los pescadores que se jactan de los peces gigantes que capturaron en el pasado. Esta es una objeción legítima para los ateos a la resurrección que los creyentes deben abordar seriamente. Sin embargo, los mecanismos de este efecto no son ni de lejos poderosos para explicar la resurrección. La inflación ocurre a lo largo de un continuo que progresa lentamente y la resurrección requiere grandes saltos de imaginación.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con recuerdos falsos

Ceguera por falta de atención o  atención selectiva: Estrictamente hablando, esto es más un error de percepción cuando estamos tan obsesionados con una cosa que nos perdemos las señales que nos rodean. Si alguna vez has visto el video de baloncesto gorila, ese es un ejemplo de esto. Sin embargo, lo mismo ocurre cuando estamos tan seguros de que estamos en lo correcto sobre algo que simplemente pasamos por alto descaradamente o no recordamos cosas que se oponen a nuestro punto de vista. Es probable que esta sea la razón por la que los ateos a menudo usan definiciones incorrectas de fe o repiten los mismos malentendidos sobre el kalam (por ejemplo, quién creó a Dios) incluso después de haber sido corregidos. La corrección simplemente no se registra en ellos porque están muy seguros de que tienen razón. Por otro lado, veo que la apologética se fija tanto en los detalles pedantes de una objeción al cristianismo y pierde todo el sentido de lo que la otra persona estaba diciendo.

    – Relacionado con la heurística de disponibilidad, sesgo de creencias, sesgo de confirmación

Efecto de víctima identificable: La tendencia a dar más recursos a una sola persona necesitada en lugar de a un gran grupo de personas necesitadas. Esta es la razón por la que las organizaciones benéficas generalmente muestran a una sola persona necesitada en sus anuncios en lugar de un grupo completo de personas que sufren. Para la apologética, hablar sobre las más de 120 personas asesinadas por ateos en el siglo XX es menos poderoso que enfocarse en una sola víctima con mayor detalle. Lo ideal sería que ambos puntos tuvieran el mayor impacto.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con la cercanía, el efecto gota a gota, la viveza

Individualismo: Esto es más un factor cultural o de personalidad, pero definitivamente sesga nuestra toma de decisiones. Para las personas de culturas individualistas o personas de alto nivel individualista (similar a la reactancia), cualquier cosa que parezca violar su libertad personal se verá de forma negativa. Políticamente, esto se correlaciona con puntos de vista libertarios y conservadores, que es donde tengo la sensación de que muchos apologistas se alinean. Esto debería hacer que algunos apologistas se cuestionen si realmente han basado algunos de sus puntos de vista teológicos y políticos en Jesús o si se basan más en su deseo de individualismo. No digo que sus opiniones estén equivocadas; solo que deben ser examinados cuidadosamente. En apologética, esta es a menudo la razón subyacente por la que la gente se rebela tan fuertemente contra la norma moral de Dios, porque no

    – Igual y casi igual que la reactancia

    – Relacionado con el colectivismo de conformidad de la reactancia

Sesgos dentro / fuera del grupo: Estos son dos sesgos diferentes, pero a menudo se usan para describir lo mismo y se usan indistintamente. La razón es que son solo dos caras de la misma moneda. Estamos predispuestos a favor de nuestro propio grupo y en contra de otros grupos. Cuando alguien de nuestro propio grupo hace algo bueno, generalmente lo aplicamos al grupo como norma y lo reclamamos como un ejemplo del carácter o la competencia del individuo. Cuando alguien del endogrupo hace algo malo, lo racionalizamos o le echamos la culpa al individuo. Lo contrario sucede con el exogrupo. Cuando un miembro del grupo externo hace algo bueno, lo aplicamos solo al individuo como una excepción a la norma o tratamos de explicarlo como un producto de la situación o no tan bueno después de todo. Cuando alguien del grupo externo hace algo malo, lo aplicamos a todo el grupo y lo vemos como la norma. La apologética es un ejemplo por excelencia de comportamientos intragrupo / exogrupo. Gente de todos lados es culpable de subirse al carro de los malos argumentos y de racionalizar. Casi lo único que puede hacer es ser consciente de este sesgo para poder tratar de evitar caer en él y trabajar en la construcción de relaciones con las personas de los grupos externos para que no lo vean como un adversario.

    – Igual o casi igual que el sesgo egoísta (pero aplicado a grupos)

    – Relacionado con el atractivo del efecto de carro, error de atribución fundamental, agrado, la mayoría (falacia)

Aversión a la pérdida: La tendencia de las pérdidas potenciales a jugar un papel más importante en nuestras decisiones que las ganancias potenciales. Esta es probablemente la razón por la que las personas están más dispuestas a conformarse con lo que tienen que a arriesgarse a perderlo por algo mejor. Las cosmovisiones son un excelente ejemplo. Si una persona tiene una cosmovisión que parece funcionar y tiene un grupo de amigos que comparten esa cosmovisión, no es fácil que se arriesguen a renunciar a ella por el cristianismo. Lucharán para demostrar que su cosmovisión es mejor e incluso si puedes mostrar que el cristianismo es una mejor cosmovisión, es posible que no estén dispuestos a aceptarlo.

    – Igual o casi igual que el sesgo de negatividad

    – Relacionado con la heurística del afecto, la heurística de disponibilidad, el sesgo de creencias, el sesgo de confirmación, el efecto de la dotación, el mero efecto de propiedad, la falacia del costo hundido y el sesgo del status quo

Efecto Mandela: Esto ocurre cuando alguien recuerda mal algo, como la muerte de Nelson Mandela (cómo se nombró el efecto), y luego una gran cantidad de personas lo creen. Se ha extendido a amplias normas culturales y detalles de la cultura pop. En realidad, hay varias pruebas en línea que puede realizar para demostrar este efecto y darle una mejor idea de qué es. Aquí está solo  uno de ellos. Este es quizás uno de los argumentos más fuertes contra el cristianismo, específicamente la resurrección, pero los críticos no lo usan. Es mejor que la teoría del desmayo, la teoría de la alucinación y todos los demás intentos de explicar la resurrección, pero aún se queda corto. Este efecto no puede explicar los relatos de testigos oculares, los informes de Pablo y los apóstoles que realizaron milagros en el nombre de Jesús, y no toma en cuenta la capacidad de memoria de las personas del primer siglo.

    – Igual o casi igual que el procedimiento DRM, recuerdos falsos

    – Relacionado con la inflación de la imaginación

Mera exposición: Esta es la tendencia a estar más dispuestos a aceptar cosas a las que hemos estado expuestos antes. En otras palabras, las cosas nuevas (como la evidencia del cristianismo) son extrañas para nosotros y parece poco probable que sean ciertas, por lo que las rechazamos. No espere que la gente, ni siquiera otros cristianos, acepten los argumentos a favor del cristianismo la primera vez que los escuchen. Es probable que necesiten varias exposiciones a la idea de fe racional y evidencia antes de estar abiertos a aceptarla.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con el

Simple efecto de propiedad – La tendencia a sobrevalorar los artículos que poseemos. Esto se estudia con objetos físicos al ver cuánto comprarán y venderán las personas, pero no hay razón para que el mismo efecto no se aplique a cosas como las visiones del mundo. Esta es probablemente una de las muchas razones por las que las personas tienen dificultades para cambiar sus creencias, incluso en temas pequeños.

    – Igual o casi igual que el efecto de dotación

    – Relacionado con el efecto Ikea y el efecto no inventado aquí (NIH).

Efecto de desinformación: esto es cuando la información después de un evento afecta nuestra memoria del evento. El ejemplo clásico de este efecto es de un estudio de 1974 que mostraba a la gente una película de un accidente automovilístico. Se preguntó a los participantes qué tan rápido iba el automóvil cuando chocó, chocó, chocó, chocó o se estrelló contra el otro vehículo. Este cambio de una sola palabra afectó sus estimaciones de la velocidad del automóvil y, una semana después, los que se encontraban destrozados tenían más probabilidades de decir que vieron una clase rota. Este es un argumento potencial contra la resurrección, sin embargo, este efecto no puede explicar algo tan grande como una persona resucitando de entre los muertos o el hecho de que los autores del Nuevo Testamento presenciaron varios otros milagros e hicieron milagros ellos mismos.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con el procedimiento DRM, recuerdos falsos, inflación de la imaginación, efecto Mandela

Myside Bias: La tendencia a favorecer la evidencia y los argumentos que apoyan lo que una persona ya cree. Mi estudio favorito sobre esto pedía a los participantes que indicaran si los silogismos deductivos eran válidos y obtuvieron una puntuación de alrededor del 70%, pero cuando se les pidió que hicieran lo mismo con los silogismos del aborto que se oponían a su propia opinión, cayeron a alrededor del 40%. Al hacer apologética, necesita encontrar formas de plantear y discutir temas de una manera segura y sin emociones para que las personas estén dispuestas a pensar en lugar de rechazarlo sin pensarlo mucho.

    – Igual o casi igual que el sesgo de confirmación

    – Relacionado con el sesgo de creencias, perseverancia de creencias

Sesgo de negatividad: También conocido como efecto de negatividad, esta es nuestra tendencia a concentrarnos en las cosas negativas y recordarlas más que las positivas, a sopesar más los factores negativos en la toma de decisiones o a percibir las señales ambiguas como negativas. En resumen, los pensamientos y experiencias negativos son muy poderosos en nuestras vidas y difíciles de superar. Es por eso que las experiencias negativas en la iglesia o con los cristianos son un factor tan común entre los no creyentes, aunque lógicamente es irrelevante para que el cristianismo sea verdadero. Además, incluso si habla con alguien que tiene una visión negativa del cristianismo, puede presentar el evangelio o un argumento de disculpa de una manera neutral o incluso algo positiva y podrían interpretarlo negativamente. Esta es solo una de las razones por las que nuestro tono, estilo y palabras son tan importantes cuando hacemos apologética.

    – Igual o casi igual que

    – Relacionado con el sesgo dentro / fuera del grupo

Normalización: Cuando algo (generalmente algo extraño o raro) se encuentra repetidamente y finalmente se acepta o se ve como normal. Hemos visto que esto sucede en la sociedad en varias áreas, como la ética sexual, el género, la deuda, el divorcio y otros. La noción de que la fe puede ser racional es muy extraña para muchas personas y no encaja con su esquema de religión. Es por eso que comencé Apologética Awareness para ayudar a que la gente se familiarice con la idea de que la fe puede ser racional. La mejor manera de usar la normalización a su favor es presentar lo que desea que sea aceptado de una manera positiva y no controvertida. Para la conciencia de la apologética, el enfoque no es discutir con la gente o presentar argumentos; se trata de hacer saber a la gente que hay pruebas y que puedes ser un pensador y un creyente. Eso’

    – Igual o casi igual que el simple efecto de exposición, desensibilización sistemática, habituación

    – Relacionado con la técnica heurística de disponibilidad, el pie en la puerta


Efecto No inventado aquí (NIH)
: esto es cuando rechazamos una idea o infravaloramos algo porque no se nos ocurrió. En pocas palabras, a la gente no le gusta estar equivocada y no le gusta cuando alguien más sabe más que ellos. Una excelente manera de hacer que las personas piensen que se les ha ocurrido una idea propia es hacer preguntas importantes, preferiblemente sobre cosas en las que probablemente no hayan pensado antes. Esto es diferente a tratar de hacer preguntas que atrapan a una persona en una esquina, pero con este efecto, desea usar preguntas menos directas y no responder a la pregunta usted mismo (o señalar cómo sus puntos de vista son contradictorios). Esto también se puede usar con el mero efecto de exposición porque una vez que las personas se dan cuenta de una idea, incluso si no pueden nombrarla,
    – Igual o casi igual que el efecto Ikea

    – Relacionado con el mero efecto de exposición, sesgo egoísta, mero efecto de propiedad, efecto de dotación.

Obediencia: las personas generalmente son más obedientes a las figuras de autoridad de lo que serían de otra manera. Ciertamente, hay muchas excepciones a este y otros factores a considerar, por lo que este puede ser difícil de usar en situaciones prácticas. La mejor manera de usar esto es comprender con quién está hablando y presentarse de una manera que ellos considerarían una autoridad. En la mayoría de los casos, esto significa vestirse y hablar profesionalmente, pero con algunas personas, puede significar presentarse como un rebelde. Además, citar a personas o instituciones que la otra persona considera autorizadas también puede ser eficaz. Si la persona es atea, trate de citar lo que otros ateos han dicho que apoye lo que está tratando de decir.

    –  Igual o casi igual que conformidad, pericia, apelación a la autoridad (falacia)

    –  Relacionado con agrado, reactancia (opuesto)


Apertura (personalidad)
: la apertura a la experiencia es uno de los cinco factores principales de la personalidad que afectan a las personas y juega un papel importante en la toma de decisiones. Es probable que las personas con una alta apertura sean más liberales y más propensas a considerar y aceptar puntos de vista alternativos, pero pueden sentirse demasiado cómodas con las contradicciones o la ambigüedad y no estar dispuestas a comprometerse con un punto de vista. Es poco probable que las personas con poca apertura consideren la nueva evidencia que se les presenta en primer lugar, e incluso si puede hacer que la consideren, cambiar de opinión será extremadamente difícil para ellos.

    – Igual o casi igual que
     –  Relacionado con sesgo de confirmación, perseverancia de creencias

Condicionamiento operante: Esto es solo recompensas y castigos. No solemos pensar en cómo interactuamos con las personas en términos de recompensas y castigos, pero nuestro cerebro procesa las señales de conversación de la misma manera. Cuando interrumpes a alguien cuando habla, lo criticas o su punto de vista, o le señalas una falacia lógica, su cerebro procesa eso como si estuviera siendo castigado por hablar. Hay dos soluciones para esto: reconocerán que están equivocados y cambiarán de opinión o simplemente decidirán dejar de hablarte, al menos sobre religión. Si bien ambas opciones son posibles, es mucho más probable que simplemente dejen de hablar contigo. En lugar de ser crítico, agradezca a las personas por compartir, haga preguntas auténticas, elogie las cosas positivas que dicen y dirija la atención a las áreas de acuerdo en lugar de centrarse solo en los desacuerdos.
    – Relacionado con el condicionamiento clásico, sesgo dentro / fuera del grupo, agrado, sesgo de negatividad

Sesgo de positividad: podrías estar pensando, oye, pensé que teníamos un sesgo de negatividad, ¿ahora me estás diciendo que el de ellos es un sesgo de positividad? Esta diferencia es hacia quién se dirige el sesgo. Es más probable que las personas esperen cosas positivas, tengan recuerdos positivos o tengan evaluaciones positivas sobre sí mismos o su grupo, mientras que el sesgo de negatividad se aplica a los demás y al grupo externo. Para superar esto, debe presentar argumentos de manera positiva, hacer preguntas para que las personas encuentren la respuesta por sí mismas y felicitarlas cuando sea posible.
    – Igual o casi igual que el sesgo egoísta, 

    –  Relacionado con el sesgo de confirmación, sesgo  dentro / fuera del grupo , efecto no inventado aquí, agrado.

Estilo de procesamiento (procesamiento de arriba hacia abajo o de abajo hacia arriba): todos procesamos la información simultáneamente de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba. De arriba hacia abajo es cuando vemos el panorama general y trabajamos hasta los detalles (ver el bosque antes que los árboles) y de abajo hacia arriba es cuando sumamos los detalles para comprender el conjunto (ver árboles individuales antes de reconocer un bosque). Esto no es realmente un sesgo, pero puede influir en nuestras decisiones al limitar la forma en que vemos algo o al distraernos de la pregunta real. Si estamos debatiendo si una parcela de árboles es un bosque, quedar atrapado en una discusión sobre si un solo árbol es realmente un arbusto es irrelevante para el panorama general y puede distraernos de encontrar una solución.

    –  Igual o casi igual que

    –  Relacionado con el encuadre, pistas falsas (falacia), reduccionismo (filosofía)

Efecto placebo: Aquí es cuando algo nos afecta simplemente porque creemos que nos afectará. El ejemplo obvio es cuando se administran pastillas de azúcar (placebo) como medicación para pruebas de drogas, las pastillas de azúcar realmente mejoran la salud de las personas; sin embargo, este efecto es mucho más amplio que la mera medicina. Los creyentes parecen ser especialmente susceptibles a este efecto. El efecto placebo puede explicar en gran medida por qué cosas como perlas de ámbar, aceites esenciales y otros remedios homeopáticos parecen efectivos (obviamente, con raras excepciones donde los ensayos clínicos han demostrado que son efectivos). La importancia de comprender el efecto placebo para la apologética radica principalmente en reconocer cómo los no creyentes pueden vernos confundir el efecto placebo con un efecto real. Si hablo con un ateo reflexivo y le digo que fui curado con aceites esenciales, probablemente pensará que en realidad fue solo el efecto placebo y que soy demasiado parcial o ignorante para saberlo mejor. Lo mismo es cierto para muchas afirmaciones que la gente hace sobre la oración. Es extremadamente difícil convencer a las personas de que cambien sus puntos de vista sobre algo, pero es aún más difícil si piensan que no eres inteligente. 
    –  Igual o casi igual que 

    –  Relacionado con errores de atribución, falacia de tasa base, apofenia, superstición, condicionamiento clásico, profecía auto cumplida.

Fuente:
Jay Madenwaldt, List of Decision-Making Factors and Biases for Apologetics, 2020 [En línea]